¿Qué son las tarifas de hotel?
Las tarifas de hotel son el precio que los hoteles cobran por noche por sus habitaciones y servicios asociados.
Estas tarifas no son estáticas y pueden variar significativamente según una serie de factores, incluyendo el tipo de habitación seleccionada, la temporada, y la competencia del entorno.
Para fijar las tarifas los hoteleros tienen que tener en consideración muchos factores diferentes. Tienen que pensar en sus gastos, como lo que cuesta mantener el lugar en buen estado, pagar a los empleados, y todas las comodidades que ofrecen, además de pensar en obtener una ganancia decente.
Durante el año, los precios pueden subir o bajar bastante. Esto puede ser por la temporada turística, si hay algún evento grande en la ciudad, o simplemente por cómo va la cosa en términos de cuánta gente está reservando.
Además, los hoteles juegan mucho con su estrategia de precios para atraer a distintos tipos de clientes. Por ejemplo, pueden ofrecer tarifas premium durante los períodos de alta demanda o descuentos promocionales en tiempos de menor ocupación para atraer a más clientes. Esta manera de ajustar los precios ayuda a los hoteles a mantener sus ingresos en buena forma, adaptándose a cómo cambian las cosas en el mercado y lo que buscan los clientes.
15 tipos distintos de tarifas de hotel
Entender y elegir entre los diferentes tipos de tarifas de hotel puede ser clave para maximizar la ocupación y los ingresos. Por ello, a continuación te presentamos 15 tipos distintos de tarifas, cada una con sus propios beneficios y estrategias claves.
1. Tarifa estándar o RACK
La tarifa estándar, comúnmente conocida como tarifa RACK, representa el costo más elevado de una habitación, sin aplicar descuentos ni incluir extras adicionales. Es el precio que normalmente encontrarás publicado en la página web del hotel o en su listado de precios oficial.
Muchos hoteles optan por ofrecer dos versiones de la tarifa RACK, una con y otra sin desayuno. Esta estrategia permite a los huéspedes seleccionar la opción que mejor se ajuste a sus necesidades y presupuesto.
Además, esta tarifa sirve como punto de referencia para el establecimiento de precios más competitivos y promocionales. Por lo tanto, es clave tenerla en cuenta para la estructura de precios del hotel como para establecer las estrategias de marketing dirigidas a maximizar la ocupación.
2. Mejor tarifa disponible o BAR
La mejor tarifa disponible, conocida por sus siglas en inglés como BAR (Best Available Rate), es la tarifa más económica que puede conseguir el huésped en un momento dado. Existen dos variantes principales de la tarifa BAR: la tarifa dinámica y la tarifa diaria.
La tarifa dinámica se modifica en función de la disponibilidad de habitaciones. Por ejemplo, el precio puede ser más bajo cuando la ocupación es del 0 al 20%, e ir aumentando a medida que más habitaciones se ocupen. Este sistema incentiva las reservas anticipadas cuando hay más disponibilidad.
Por otro lado, la tarifa diaria se establece según el día de la semana, reflejando una estructura de precios fija que cambia con cada día. Esto puede significar, por ejemplo, que hospedarse de domingo a martes cueste menos que durante el fin de semana.
3. Tarifa no reembolsable
Este tipo de tarifa requiere que el huésped pague por adelantado el total de su estancia, y como su nombre indica, no permite cancelaciones ni cambios.
Si por alguna razón el huésped no puede hacer uso de la reserva, el dinero abonado no será devuelto. A pesar de las restricciones, esta tarifa suele ofrecer un ahorro considerable comparado con las tarifas estándar, a menudo con descuentos que varían entre el 5 y el 10%.
Con la incertidumbre generada por situaciones como la pandemia, ha habido un ligero declive en la popularidad de las tarifas no reembolsables. Sin embargo, para aquellos viajeros que tienen planes seguros y buscan las mejores ofertas, esta tarifa sigue siendo una opción válida.
4. Tarifa de última hora
La tarifa de última hora es perfecta para aquellos que reservan su alojamiento con poco tiempo de anticipación o incluso directamente al llegar al hotel.
Esta opción ofrece un precio más accesible en comparación con la tarifa estándar, y es una estrategia que los hoteles utilizan para asegurarse de que no se queden con habitaciones vacías.
El descuento asociado a la tarifa de última hora puede variar, pero generalmente oscila entre el 10% y el 15%. Se activa dentro de las 24 a 48 horas previas al día de llegada, incentivando así a los huéspedes potenciales a tomar una decisión rápida y beneficiarse de precios reducidos.
5. Tarifa de reserva anticipada
En contraste con la tarifa anterior, la tarifa de reserva anticipada es una excelente opción para los planificadores y los viajeros previsores que saben con certeza cuándo estarán de viaje.
Este tipo de tarifa ofrece descuentos significativos para reservas hechas con una antelación considerable, generalmente desde 30 días hasta 6 meses antes de la fecha de llegada. Además, esta tarifa a menudo viene con condiciones como el pago anticipado no reembolsable, lo que implica un compromiso firme por parte del huésped.
Para los hoteles, esta es una estrategia eficaz para estabilizar su flujo de ingresos y planificar con más precisión sus recursos y servicios. Para los huéspedes, representa una oportunidad de asegurar un buen precio, sabiendo que su planificación adelantada tiene una recompensa tangible.
6. Tarifa por duración de la estancia (LOS)
La tarifa por duración de la estancia, también conocida por sus siglas en inglés como LOS (Length of Stay), ofrece un descuento que aumenta con el número de noches que el huésped decide alojarse.
Es una opción atractiva tanto para los viajeros como para los gestores del hotel, ya que cuanto más extensa es la estancia, menor es el costo relativo de mantenimiento de la habitación y mayor la probabilidad de que el huésped realice gastos adicionales en servicios del hotel como restaurantes, spa o actividades recreativas.
Además, las estancias largas suelen traducirse en reseñas más positivas, ya que el huésped desarrolla una mayor conexión y familiaridad con el lugar y el personal.
7. Tarifa promocional
Las tarifas promocionales son excelentes para aumentar las ventas de habitaciones, especialmente durante la temporada baja. Éstas pueden incluir incentivos como "dos noches por el precio de una" o incluir un desayuno o parking gratuito.
Además, muchas propiedades implementan códigos promocionales que los huéspedes pueden usar al reservar directamente a través del sitio web del hotel. Estos códigos suelen ofrecer descuentos exclusivos a clientes que ya han estado en el hotel o a aquellos suscritos a la lista de correo, proporcionando un valor añadido que fomenta la lealtad y el compromiso a largo plazo.
8. Tarifas por regímenes de alojamiento
Estas tarifas se clasifican típicamente como AD (Alojamiento y Desayuno), MP (Media Pensión), PC (Pensión Completa), y TI (Todo Incluido).
Cada una de estas opciones responde a distintas necesidades y expectativas de los huéspedes, permitiéndoles elegir según sus planes de viaje y preferencias. Al mismo tiempo, este tipo de tarifas va a depender de la ubicación y el tipo de hotel que sea. Por ejemplo, un régimen todo incluido es muy habitual en lugares de playa como el Caribe, pero no tanto en las grandes ciudades donde las opciones de gastronomía abundan.
9. Tarifa familiar
Esta tarifa está especialmente diseñada para aquellos que viajan con niños. Suele incluir camas extra en la habitación sin coste adicional y, muchas veces también incorpora beneficios como desayuno buffet y acceso a instalaciones recreativas como la piscina. Además, puede ofrecer descuentos en actividades diseñadas para toda la familia.
Este tipo de tarifa posiciona al hotel como un destino ideal para las vacaciones familiares, incrementando así la fidelidad de los clientes y las posibilidades de recomendaciones positivas.
10. Tarifa corporativa
Esta tarifa especial está diseñada para huéspedes que visitan con frecuencia el hotel por motivos laborales. En muchos casos las tarifas corporativas suelen negociarse directamente con las empresas, proporcionándoles precios competitivos y exclusivos que no están disponibles para el público general.
Este tipo de tarifa puede incluir beneficios adicionales adaptados a las necesidades de los viajeros de negocios, como desayuno incluido y políticas de cancelación más flexibles, entre otros.
Establecer una tarifa corporativa no solo fomenta la lealtad de las empresas hacia tu hotel, sino que también asegura una fuente constante de reservas, lo que es especialmente valioso en periodos de menor demanda turística.
11. Tarifa para grupos
Esta tarifa es ideal para hoteles que pueden alojar a grandes grupos de personas que viajan por eventos corporativos, conferencias, tours turísticos, bodas, entre otros.
Esta tarifa ofrece buenos descuentos para el grupo y al mismo tiempo, asegura que el hotel llene varias habitaciones de una vez. Normalmente, estas tarifas se negocian y se establecen con las agencias de viajes, empresas organizadoras de eventos o los planificadores de bodas.
Los hoteles pueden definir un número mínimo de habitaciones o de huéspedes para calificar como grupo, y a partir de ahí ofrecer condiciones especiales que pueden incluir, no solo precios reducidos, sino también políticas de pago y cancelación adaptadas a las necesidades del grupo.
12. Tarifa de medio día
La tarifa de medio día es especialmente útil en hoteles cercanos a aeropuertos o en establecimientos que atienden a huéspedes de negocios.
Esta opción permite a los viajeros alquilar una habitación por unas pocas horas, lo cual es ideal para quienes necesitan un descanso breve entre vuelos o un espacio tranquilo para trabajar durante el día.
Esta modalidad ofrece la ventaja de poder rentar la misma habitación dos veces en el mismo día, por ejemplo, durante la mañana y luego de nuevo para una estancia nocturna. Sin embargo, es importante considerar que esto puede presentar desafíos logísticos para el equipo de limpieza y mantenimiento.
13. Tarifa complementaria
La tarifa complementaria, también conocida como tarifa de cortesía, es un tipo especial de tarifa que no se encuentra anunciada online, sino que se maneja exclusivamente a través del PMS del hotel. Esta tarifa se fija en 0 euros y se utiliza para ofrecer estancias gratuitas a ciertos huéspedes bajo circunstancias particulares.
Generalmente, esta tarifa se aplica en casos como compensación por algún inconveniente previo, para relaciones públicas o colaboraciones con influencers y medios de comunicación, o incluso para personal del hotel durante sus viajes de formación.
14. Tarifa flexible
Esta tarifa permite a los huéspedes cancelar o modificar su estancia sin penalizaciones hasta un cierto límite de tiempo antes de la fecha de llegada. Generalmente, esta flexibilidad tiene un costo superior al de tarifas más restrictivas como la tarifa no reembolsable.
En un mundo post-pandemia, la tarifa flexible se ha vuelto especialmente popular. Muchos viajeros valoran la capacidad de poder adaptarse a cambios inesperados sin enfrentar cargos adicionales.
15. Tarifa de fidelidad
Algunos estudios indican que conseguir nuevos clientes puede ser entre 5 y 25 veces más caro que retener a los actuales. Por eso, ofrecer tarifas especiales a huéspedes que ya han estado en el hotel es una manera inteligente de mantenerlos regresando.
Estas tarifas de fidelidad suelen incluir descuentos y ofertas exclusivas para miembros de programas de lealtad, similares a los programas Genius de Booking o Rewards de Expedia, donde el hotel asume el costo del descuento ofrecido.
Ofrecer este tipo de tarifa no solo mejora la lealtad del cliente sino que también incrementa la probabilidad de recomendaciones y valoraciones positivas, ampliando el impacto positivo en la reputación y en la rentabilidad del hotel.
Las mejores estrategias para gestionar las tarifas de un hotel
Estas son algunas de las estrategias más eficientes para gestionar los costes de tu alojamiento:
Conocer el producto
La base de todo es entender bien qué producto estamos ofreciendo. No es lo mismo intentar vender un bungalow en un cámping de la costa mediterránea, que ofrecer una habitación suite en Vancouver. Al definir correctamente qué vendemos, podremos intuir con más concreción a qué mercado dirigirnos.
Identificar a tu target
Una vez definido el producto o servicio que ofrecemos, hay que identificar nuestro público objetivo y en general, el mercado al que nos queremos dirigir. Como pasa con el producto, no es lo mismo considerar al turista que reservará habitaciones de un hotel cápsula en Tokio, que a una pareja que pasa varias noches en una cabaña con sauna en un lago de Finlandia.
Descifrando a nuestro cliente target, podremos tomar decisiones a nivel de qué tarifas son las adecuadas y cuáles pueden ser más competitivas en el mercado.
Para lograr esa información es recomendable guiarnos por estudios de mercado que nos ayuden a ver qué hace nuestra competencia y también estar al día de las tendencias de la industria hotelera.
Aplicar precios dinámicos
Es una estrategia dinámica que permite ajustar las tarifas en tiempo real en función de la demanda. Es muy sencillo: cuando aumenta la demanda, se recomienda subir las tarifas; y cuando ésta disminuye, se bajan los precios. En definitiva una tarificación que se rige por la ley de la oferta y la demanda. Su gran ventaja es que en temporada alta se ingresa más y en los meses más bajos, al tener precios más competitivos, logramos maximizar la ocupación.
Ser flexible
Puesto que es difícil tener todo parametrizado y bajo control, es importante que los gestores de los hoteles entiendan la importancia de adaptar las tarifas a acontecimientos e imprevistos externos, ya sean negativos o positivos.
Por ejemplo, si nos baja la demanda inesperadamente por el inicio de un conflicto armado (una guerra como la de Ucrania, un atentado como el de Barcelona en 2017, etc.), un desastre natural (nevada fortuita, lluvias torrenciales, etc.) o por otro lado, porque una película o uno famoso ha puesto de moda un destino o un hotel en concreto, entonces hay que ser consecuentes y adaptar nuestras tarifas a la realidad de ese momento.
Usar software de gestión de ingresos
Estos sistemas son los que ayudan a los hoteles a gestionar mejor sus ingresos. Su metodología es muy fácil: monitorizan la demanda y hacen pronósticos de la ocupación hotelera para lograr de ese modo, optimizar y personalizar las tarifas según el periodo, la demanda o cualquier imprevisto.
Es una tecnología compatible con los PMS, hecho que lo hace muy atractivo, puesto que puedes ajustar automáticamente tus tarifas según los parámetros preestablecidos.
Integrar software PMS hotelero
Los PMS (sistemas de gestión de propiedades hoteles) son softwares específicos que ayudan a los hoteles a optimizar sus tarifas e ingresos. Integrados con las operaciones que surgen desde la recepción del hotel, te permiten pronosticar la demanda , ajustar o establecer tarifas de habitación, así como hacer seguimiento de la ocupación e inventario.
Optimiza la gestión de las tarifas de tu hotel con Mews PMS
Si lo tuyo no son las matemáticas y no sabes cómo gestionar las tarifas de tu hotel, hoy es tu día de suerte, porque a continuación te presentamos un software de gestión de tarifas e ingresos fácil de usar, versátil y perfecto para optimizar los inventarios y aumentar los beneficios de tu negocio: el software de gestión de ingresos hoteleros de Mews.
Tus tarifas, tus reglas
Con Mews PMS podrás crear y personalizar tarifas de productos, así como aplicar tus reglas para ajustarlo a las necesidades de tu hotel.
Podrás programar el sistema para que se actualicen tarifas automáticamente según la demanda en tiempo real: por ejemplo, si ante un congreso importante en la ciudad experimentas una alta demanda, el software aumentará al momento las tarifas que quieras, y viceversa, te las ajustará a la baja si hay poca demanda. Sin duda, una dinámica que se demuestra eficaz si lo que buscas es mejorar tu ocupación y rentabilidad.
Crea tarifas paquete
Otra de las grandes ventajas de nuestro software de gestión de ingresos es la simplificación de la gestión de las tarifas paquete, puesto que el mismo software añade productos automáticamente para formar paquetes en la reserva. Además te permite configurar tus propias reglas sobre qué productos y tarifas incluir en cada pack, hecho que ayudará a seducir al cliente con atractivas opciones en la reserva.
Integración con soluciones RMS
Gracias a su Mews Open API podrás integrar el software con cualquier RMS (Revenue Management Systems). Lograrás conectar fácilmente tus herramientas de gestión de ingresos personalizadas o buscar el RMS más conveniente para tu negocio en Mews Marketplace y que ayude a aumentar los ingresos de tu hotel.
Marca precios base
Mews RMS permite marcar precios base que garanticen ingresos mínimos de tus habitaciones y hagan rentable a tu hotel.
Tarifación manual
Además de la automatización de los cambios de tarifa, con Mews RMS también podrás anular tus reglas preestablecidas y cambiar de forma manual las tarifas cuando tú quieras, por ejemplo en fechas muy concretas, días de la semana que más te convengan y modificar categorías de habitación.
Tarifas dependientes
Crea tarifas con reglas y dependencias con otras tarifas. Por ejemplo, crea una tarifa base que irá vinculada a otras tarifas para que los futuros cambios que apliques en la tarifa base, vayan reflejados y se apliquen en el resto de tarifas dependientes.
Restricciones para tarifas
Define parámetros a tu medida, como la ocupación determinada o algunos días festivos, y ajústalo automáticamente a las tarifas de habitación que elijas.
Ajustes de categorías
Otra de las múltiples ventajas y funciones de Mews RMS es la posibilidad de crear categorías de habitaciones y espacios, y ajustar así, los precios de todos los espacios en una sola categoría simultáneamente.
Conclusión
En definitiva, además de comprender qué producto vendemos y qué tipo de huésped queremos, si queremos garantizar el éxito en ventas, es vital lograr una gestión de las tarifas de un hotel eficaz.
Queda demostrado que al crear una sólida estrategia de tarifas que incluya análisis de datos y contexto de mercado, uso de precios dinámicos y flexibles, y sobre todo, el uso de un buen software de gestión de tarifas, nos asegura rentabilizar al máximo la ocupación y los ingresos de un hotel.
Descarga nuestra guía "La nueva era de las métricas hoteleras para gestores de ingresos"
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